Los nómadas digitales que quieran desarrollar su actividad profesional desde España lo tendrán mucho fácil a partir del 1 de enero de 2023, fecha en la que entrará en vigor el visado específico para los teletrabajadores internacionales. Esto se traducirá en menos burocracia, más facilidades y más incentivos fiscales para los nómadas digitales. A partir de ahora, tendrán la posibilidad de vivir y trabajar en España durante cinco años.
El Congreso de los diputados aprobó hace unos días la Ley de Startups en la que se incluye este visado para teletrabajadores internacionales. El Gobierno busca con esta ley convertir España en un polo de emprendimiento y atraer inversiones y talento digital. La ley incorpora mejoras y ahora será remitida al Senado para continuar su tramitación y ser aprobada a final de 2022, según la previsión oficial.
Este visado servirá para ejercer desde el territorio español una actividad laboral o profesional a distancia para empresas radicadas fuera de España. La duración del visado será de un año prorrogable hasta cinco y permitirá a los nómadas digitales disfrutar de un régimen fiscal especial por el que pasarán a tributar por IRNR (impuesto sobre la renta de no residentes) y no por IRPF (impuesto sobre la renta de las personas físicas). La ley también da facilidades para obtener el visado y la residencia a trabajadores altamente cualificados de startups así como a trabajadores españoles no residentes en España durante, al menos, los últimos cinco años.
El visado está abierto a cualquier país y podrán solicitarlo los profesionales que tengan un salario mínimo no muy diferente al SMI español (unos 1.000 euros), lo que supone una gran ventaja competitiva con respecto al visado portugués para nómadas digitales, que eleva los ingresos a unos 2.820 euros mensuales.
Los inversores y freelance extranjeros que trabajen para startups españolas podrán acogerse al régimen de impatriados siempre que el 40% de su facturación sea para estas empresas, y tributarán el IRPF al 24%.
El visado también está pensado para frenar la despoblación en el interior de España por lo que incluye elementos para fomentar el emprendimiento en el mundo rural.
La ley no solo busca atraer talento sino también retenerlo y quienes finalicen sus estudios en España dispondrán de más tiempo para buscar empleo o emprender en el país.
Por tanto, a partir de enero será más fácil para los remote workers trabajar con más de 360 días de sol, afrontando un coste de vida más barato, beneficiarse de exenciones fiscales, una excelente cobertura 4G (en casi toda España) y con una calidad de vida considerada de las mejores del mundo.
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